Esta semana se lanzó Mortal Kombat 11: Aftermath. Se trata de un DLC profundo para un juego ya por sí exitoso. ¿Pero vale la pena?
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2/11
De entrada nos trae a tres nuevos personajes: Fujin, Sheeva y Robocop. El primero, dios del viento, es un personaje ágil y que puede sacar provecho de ataques rápidos para reducir a sus oponentes.
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3/11
Sheeva, la reina Shokan, es una combatiente pesada pero salvaje. Puede a corta distancia acabarte con agarres y lanzar llamas que te mantienen a raya.
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4/11
Robocop, el personaje invitado, cuenta con la apariencia del actor original Peter Weller. Es un peleador duro, fuerte y que aprovecha tanto disparos con arma de fuego como trampas tácticas para generar daño.
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5/11
Naturalmente estos personajes suman mucha brutalidad. Pero nada como los nuevos escenarios, que permiten realizar fatalities con estos nuevos ambientes. Tal como antaño.
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6/11
¿Robocop contra Terminator? En escenarios llenos de vida (y muerte), así como guiños al pasado arcade de la franquicia Mortal Kombat, son un lujo.
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7/11
El contenido es amplio para ser una expansión, más que un mero DLC.
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8/11
La expansión tiene un añadido en la historia, relativamente corto, en el que Liu Kang debe volver al pasado para recuperar la corona de Kronika y restablecer con éxito la línea temporal.
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9/11
Puede que sea un añadido corto y con muchos nudos narrativas, pero hace todo el sentido considerando la trama y, además, es uno muy entretenido.
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10/11
No necesitas, eso sí, tener la expansión para tener a los remates de Friendship. Movimientos finales llenos de humor y buen rollo. Muy al estilo de Mortal Kombat 3.
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11/11
¿Disfrutaste del juego base? Sin duda esta expansión tiene mucho para ofrecente y es muy valiosa. Aunque si no te interesa la historia nueva o los personajes, integra gratuitamente buenos contenidos.