Armando Hernández lloró al recordar trabajo como botarga de Barney

Armando Hernández, actor de Amarte Duele (2001) y parte del elenco de Me Caigo de Risa, estuvo como invitado en el programa de YouTube Pinky Promise, donde lloró al recordar que tuvo que trabajar como botarga luego de haber hecho la película

El hermano de la Familia Disfuncional comentó que aceptó ese trabajo porque no tenía dinero, por lo que alegraba fiestas infantiles usando un botarga de Barney.

Después de hacer Los héroes del norte, Armando se quedó sin trabajo en 2011 y “estaba pasándola muy gacho. Te lo juro, no tenía lana. Mi roomie me donó toda la comida”.

El nominado al Ariel comentó que cuando iba a ser el primer cumpleaños de su hijo quería hacerle una fiesta, por esa razón buscó a su amiga Mariana Chagoya, para que le diera un trabajo y ella sólo le pudo ofrecer el de darle vida al dinosaurio que vive en nuestra mente en las explanadas delegacionales de la Ciudad de México, empleo que él aceptó agradecido.

“Si yo me la hubiera creído de que era el de Amarte duele, de que era el gran actor, no hubiera aceptado nada de eso, pero había algo más grande que era el cumpleaños de Claudio”, contó Hernández conmovido y entre lágrimas.

“He estado arriba y he estado abajo, he sabido lo que es la riqueza y la pobreza” agregó Armando, quien a pesar de considerar que fue uno de los trabajos más difíciles de su vida, también se siente orgulloso de haberlo hecho, pues así pudo realizar la fiesta de su hijo.

En el mismo programa, una de las preguntas que le tocaron a Armando fue la de con qué íntegrante de la Familia Disfuncional tendría relaciones, con quién se casaría y a quién mataría. Sobre la primera interrogante, respondió que elegiría a Gaby Platas por su experiencia, y bromeó al comentar que también a José Luis Ródriguez "El Guana" porque una vez le tocó una pompa y comentó que "la tiene dura, y la nalga también".

El histrión confesó que se casaría con Michelle Rodríguez y con Faisy, aunque asimismo admitió que también lo mataría a él para quedarse con el programa, sólo para después decir que no era cierto. De hecho apenas le dio un besote épico en el programa y nunca lo vamos a olvidar.